Unos jóvenes poco populares deciden contratar a un guardaespaldas de poca monta (Owen Wilson) para que les proteja de unos matones que les están haciendo la vida imposible. Todo empieza el primer día de instituto. Los nuevos alumnos Ryan, Wade y Emmit se convierten en el blanco instantáneo del "matón" del instituto, Filkins, un torturador nato. De pronto, lo que imaginaban como los mejores años de su vida se convierten en un infierno. Los chicos se dan cuenta de que sólo les queda una solución, contratar a Drillbit Taylor (Wilson) como guardaespaldas. Posiblemente no sea el mejor mercenario, asesino a sueldo o gorila, pero sin duda alguna, es el más barato de los que contesta al anuncio que colgaron en la red…