Diane Lane (Adrienne Willis en la película), protagoniza a una mujer con una vida caótica, la cual se retira a un pequeño pueblo costero de Rodanthe, en el Outer Bank de Carolina del Norte, para atender la posada de un amigo durante el fin de semana. Allí espera encontrar la tranquilidad que tan desesperadamente necesita para pensar acerca de sus problemas: un marido caprichoso que le pide volver a casa y una hija adolescente resentida con cada decisión.
Al poco tiempo de la llegada de Adrienne a Rodanthe, se pronostica una importante tormenta y llega un cliente llamado Dr. Paul Flanner (Richard Gere), el único huésped del pequeño hotel, Flanner no está de escapada de fin de semana, si no que va allí para afrontarse a su propia crisis. Ahora, con la tormenta acercándose, se buscan el uno al otro para reconfortarse. En un mágico fin de semana, se pone en marcha un romance que les cambiará y que recordarán el resto de sus vidas.