Johnny Depp interpreta a Benjamin Barker, un hombre injustamente encarcelado durante quince años que consigue escapar a Londres con la promesa de vengarse. Adoptando la apariencia de Sweeney Todd, Barker regresa a su vieja barbería en el piso de arriba de la pastelería de la Sra. Lovett (Helena Bonham Carter). Una vez allí, dirige su punto de mira hacia el juez Turpin (Alan Rickman), que le envió a presidio para robarle a su mujer, Lucy (Laura Michelle Kelly), y a su hija pequeña.